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CRISTINA RUIZ
El motivo de escribir hoy esta carta se llama Migue y es mi hijo, un niño maravilloso que cumplirá 9 años en mayo, y que tiene autismo.
El día 2 de abril se celebra el día mundial por la concienciación del autismo. Se iluminarán de azul edificios emblemáticos en todo el mundo dentro del evento "light it up blue" (ilumínalo de azul), promovido por Autism Speaks, como el Empire State, el Corcovado... en Valencia iluminaremos parte del Museo de las Ciencias Príncipe Felipe y el Umbracle. Además colgaremos globos azules en ventanas y balcones, y se realizarán multitud de eventos informativos y sensibilizadores para conseguir acercar a la gente a la realidad de este trastorno.
¿Por qué el color azul? Porque hace tiempo se decidió que era el color que iba a representar el autismo y nuestra lucha diaria para que se reconozcan los derechos de nuestros hijos y familiares.
El autismo es un trastorno, que no una enfermedad, que afecta a uno de cada 150 niños. Esto implica, por una parte, una gran variabilidad (hay tantos tipos de autismo como personas que lo padecen), y por otra, que no hay cura conocida. Eso no quiere decir que no se pueda actuar, que nos quedemos de brazos cruzados. De hecho es el trabajo intensivo, diario y contínuo el que permite que obtengamos resultados sorprendentes en nuestros hijos.
Para nosotros es muy importante este día porque refleja el esfuerzo que hacemos como familiares docentes, terapeutas y asociaciones de padres (en mi caso ASPAU, Asociación Proyecto Autismo) o grupos como'Contra los mitos del autismo', para desterrar viejas creencias y falsos mitos, y denunciar las innumerables ocasiones en que se utiliza la palabra autismo como insulto. De hecho, gracias a la iniciativa de una madre valenciana, Inma Cardona, se ha conseguido recientemente que la RAE cambie la definición de autismo por otra que se acerca más a la realidad.
Nuestros hijos no viven en otro mundo, viven en éste aunque a veces lo hagan desde otra perspectiva. Son muy cariñosos y con ganas de comunicarse, aunque no siempre les resulte facil conseguirlo. Para eso y mucho más estamos todos los que les queremos, peleando con todas nuestras fuerza para que tengan una vida plena, satisfactoria y lo más autónoma posible dentro de las posibilidaes de cada uno. Para nosotros, todos los días son 2 de abril.
Un último consejo. Si tenéis la ocasión de acercaros a conocera un niño con autismo, no la perdáis. Descubriréis lo enriquecedora que puede ser la relación. Y os quedaréis prendados por ellos de por vida, lo digo por experiencia.
Muchas gracias por vuestra atención. Y recordad, si este lunes veis globos azules en el cielo, es que seguimos luchando. Y que esa lucha tiene su recompensa.
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