Y llegó el gran día...
Transformados en el Señor Bert,
y en Mary Poppins.
Pero que "requeteguapos", venían todos.
Cada uno sofocaba el calor como podía, con ideas como la de Abraham, jaja.
Llegó nuestro turno.
Lo hicimos fenomenal.
Felicidades a todos los niños y niñas por lo bien que bailaron, con la complejidad de la coreografía, muchos pasos y cambios en tan poco tiempo.
Muchas gracias también a vosotros papis y mamis por vuestra colaboración, la puesta en escena fue preciosa, sin vuestra contribución no hubiese sido posible.
FELICIDADES.